Buenos días, amigo!

Estas fotos son mis favoritas... Está guapísimo recién levantado!

Segundo baño

Pumuki ya sabe lo que es la hora del baño, y no la lleva nada bien. El pobre hace unos esfuerzos increibles para salir de la bañera sin ningún éxito...

Pumuki buscando su premio

A veces cuando sabe que ha hecho sus cositas en su sitio va hacia su fresa y busca su premio.

Segunda vacuna

Hoy hemos vuelto a llevar a Pumuki al veterinario y es que le tocaba la segunda vacuna del moquillo. ¡Se ha portado de maravilla! La verdad es que la veterinaria siempre nos dice que es muy bueno. Le ha mirado lo de la obstrucción de la naricita y la sigue teniendo obstruida, pobret. Nos ha dicho que sigamos poniéndole las gotas.

Su primera experiencia con el agua

No le gusta el agua. Al principio parecía que si, porque parecía que estaba agusto, pero cuando realmente se ha dado cuenta de que no podía salir de la bañera ha empezado a ponerse nervioso. Cuando lo hemos sacado ha empezado a correr y ha puesto toda la casa perdida de agua! No hacía más que esconderse en sus juguetes y que chuplarse, claro, el pobre nunca se había mojado y no sabía lo que es eso de estar calado hasta los huesos!

Primer paseo!

Creo que a Pumuki eso de salir al parque no le gusta. Hoy lo hemos bajado por primera vez al parque debajo de casa y no hacía más que meterse entre las plantas y quedarse allí tumbado, sin moverse casi. No sé si es que tenía frío, o no se siente seguro en la calle, la cuestión es que no le he visto disfrutar de su primer paseo. A ver si en la próxima salida las cosas cambian.

Primera visita al veterinario

Bueno, hoy tocaba veterinario y es que le tocaba la vacuna del Moquillo. En Meliana, donde nos dieron toda la documentación del animal, nos dijeron que esa vacuna hay que ponérsela una vez y luego a los 20 días repetirla. Pero yo creía que estos bichos ya venían con la del moquillo y con la de rabia puestas, pero así como en el pasaporte le aparecía la vacuna de la rabia como puesta, de la del moquillo no decía nada, así que no sabíamos si llevaba ya la primera o no.
La chica de Meliana nos ha dicho que si no lo ponía en la cartilla era que no la llevaba.
Nos han atendido dos chicas jóvenes súper majas, y he quedado muy contenta con el trato recibido. Primero ha habido un pequeño de lío porque su máquina no reconocía el chip que lleva el Pumi, pero al final le han abierto una cartilla nueva que lo identifica en caso de problemas.
Lo primero que han hecho ha sido pesarlo –pesa 1.800kg- y luego le han cortado las uñas. Al ver que tenía el ojo un poco así con legañitas, le han echado unas gotas y han comprobado que tiene algo obstruido por ahí dentro, que hay que curar con gotas. Luego ya le han puesto la vacuna y me han dicho que en diez días ya lo puedo sacar a la calle si quiero. La verdad es que Pumi se ha portado ¡de maravilla! Hasta las chicas nos han dicho que a diferencia de otros se ha portado muy bien, y que tiene muy buen carácter. La verdad es que ya no es tan malo como al principio de tenerlo. Lo que pasa, pobret, es que se ha pasado el resto del día acostaete sin moverse casa, muy apagaete, nos han dicho las veterinarias que le pasaría.

Juguetes!

Para mí, una de las mejores páginas donde comprar cosas para hurones es mundohuron.com y como no me gusta comprar por internet sin saber a quien compro,la primera vez me fui hasta Las Rozas a conocerlos personalmente y a ver la tienda. La verdad es que cuando la vi flipé, la tienda no era grande, pero había mogollón de cosas y el chico que nos atendió fue muy amable. Salí de ayer con un montón de juguetes, de comida y de cosas para Pumuki. Así que si quereís comprar por internet cosas para hurones os recomiendo esa web.
Estos son algunos de los juguetes que compré:
El pez.
El play-tunel.
El tubo.
El pulpo.

Destructor masivo

Este juguete no le ha durado ni dos días...

Pumuki nos enseña su casa

Trucos

Ya hemos pillado la forma de que Pumuki nos deje dormir por la noche. Se trata de cansarlo por la tarde jugando con él con una pelotita o haciéndolo correr. Cuando se cansa lo metemos en la jaula para que cene y después de cenar se queda frito.
Como cuando se despierta le da por rascar para abrir la jaula, al final hemos optado por dejársela abierta, pero cerrando la puerta de la habitación para que cuando se despierte a mitad noche y quiera salir pueda hacerlo libremente por la habitación.

Pumuki está aprendiendo a acudir cuando le llamas: también es un truco fácil. Yo lo que hago es que mientras le llamo, al mismo tiempo pego unos golpecitos con la mano en el suelo y con la otra sostengo algo de comida que le guste. Lo de hacer ruido es para llamar su atención, porque sólo llamándolo no viene. Al oir el ruido viene, (porque es un cotilla jeje) y sabe que cuando viene tiene premio. Se lo hago a menudo.

Pumuki no nos deja dormir

Pumuki lleva varios días que por las noches no nos deja dormir. No quiere estar en la jaula y empieza a hacer ruidos con sus patitas intentando abrirla. La verdad es que últimamente durante el día lo dejamos muy libre por la casa y cuando llega la hora de encerrarlo hay problemas.
Se pasa el día escondido y durmiendo por algunos rincones que ha encontrado por casa, y claro, luego a las doce o la una de la mañana está más despierto que una rosa. Y quiere seguir explorando la casa en vez de quedarse quieto en su jaula. Además le encanta comerse ¡la comida de los gatos! He hablado con la veterinaria y dice que no hay problema si se la come, que no es mala para él, así que no pasa nada. Menos mal!

Su amor por las papeleras

Pumuki no puede ver una bolsa, ni una papelera, ni una caja, porque le encantan! Y en cuanto ve una, se tiene que meter dentro! Da igual lo que haya dentro. Es superior a él.

No le gusta el esquinero

Pumuki ya va suelto por la casa sin miedo a los gatos, además si se nos pierde de vista Luneta es su canguro y no le pierde de vista, así que buscando a Luneta sabemos donde se ha metido. Es muy gracioso.
Pero parece que nos ha salido algo rebelde: Pumuki no quiere hacer sus cositas en el esquinero. Si se lo pongo en una esquina, él hace sus cosas en la otra. Así que... Bueno, al menos va aprendiendo poco a poco a hacer las cosas siempre en el mismo sitio: el truco para que aprendan a hacerlo en el sitio es fácil, pero hay que tener mucha paciencia: cuando veo sus intenciones de hacer en cualquier esquina que no es en la que debe, lo cojo corriendo y lo llevo al sitio y allí hace sus cosas. Luego le doy un premio (a Pumuki le encantan las pasas, las galletas y las magdalenas) y le digo que lo ha hecho muy bien. Eso no quiere decir que siempre vaya al sitio, y que ya nunca lo haga por ahí, pero con el tiempo va acostumbrándose y va al sitio.

Felicidades Pumuki!

Pumuki ha explorado toda la casa. ¡Qué trasto! Se ha metido por todos los rincones que ha pillado. Es una monada. ¡Hay que ver lo pequeño que es y el miedo que le tienen los gatos! Pumuki corría detrás de ellos y éstos salían ¡por patas!

Esta mañana tocaba visita al veterinario a que nos dieran su cartilla y a echarle un vistazo. Silvia, la chica que nos ha atendido, ha sido muy simpática y nos ha dado mucha información sobre cómo cuidarlo. Lo primero que nos ha dicho es que efectivamente es macho y justo ¡hoy es su cumple! Acaba de cumplir ¡5 meses! ¡Felicidades, Pumuki!

Nos ha dicho cómo reñirlo cuando hace algo mal (cogiéndolo del pescuezo y dándole golpecitos en el hocico), que premios le gustan (las pasas y las manzanas es lo que ella nos recomienda), nos ha dicho que su color es el Blaze (tiene una raya blanca en la frente que le llega a los hombros), nos ha enseñado donde tiene el chip metido (en el hombro izquierdo), etc. También le ha cortado las uñas, lo ha pesado (0.5 kgs), le ha oscultado el corazón (dice que está bien). En fin, un montón de pruebas.

Al llegar a casa Pumuki ha comido y ha caído rendido. (No me extraña, ya que en el veterinario no paraba de moverse, ya que estaba muy nervioso). Al despertar se ha vuelto a recorrer la casa de arriba abajo. ¡Ha acabado tan agotado que a las 19.30 se ha dormido y ya no hemos vuelto a saber de él durante el resto del día!

La llegada del nuevo inquilino

Hoy hemos ido al centro comercial el Saler ¡a por Pumuki!

¡Qué monada! Cuando me he acercado a la jaula sólo quedaban 3 de los 6 que tenían al principio. Quedaban uno muy flaco, uno como Pumuki pero más blanquecino y Pumuki, el más guapo. La chica nos ha dicho que mucha gente se había interesado por él. ¡Y al fin nos lo hemos llevado a casa dentro de la gatera! Por el camino ¡no paraba de moverse! Estaba nervioso, emocionado, medio mareado con tanto ajetreo… pero feliz.

El llegar a casa ha sido una odisea. Willy y Luneta han reaccionado con bastante serenidad. Lo miraban por entre las rejas de la jaula, se acercaban, lo olían. Pero no ha habido maullidos ni rabos erizados. No sé si eso será bueno o malo.

Enseguida ha recorrido la jaula, pero no se atrevía (o no podía) subir a las plantas superiores. Ha encontrado una pelotita y se ha puesto a jugar como loco ignorando a Willy, a Luneta, y a todo lo que estuviera a su alrededor. Sólo le importaba su pelotita.

Poco a poco ha ido mirando los rincones de su gran mansión y le hemos enseñado a beber agua de su botella. Al poco rato se ha dado cuenta de que quería salir. Le he abierto la puerta y ha estado correteando por la habitación. ¡No se ha dejado ni un solo rincón por explorar! ¡Qué trasto! Es muy divertido. Cuando ya ha estado un buen rato jugando y oliéndolo todo lo he metido en la jaula y se ha dormido.

Cuando se ha despertado, se ha ido corriendo ¡a comer! Menudo atracón que se ha pegado. Y ale, otra vez a jugar por la habitación. Y al cabo de un rato, él solo se ha metido en la jaula y se ha quedado frito.

A la hora de comprar...

Aspecto general: capa brillante, ojos limpios y alerta. Cuando el animal está despierto se muestra activo y se mueve con seguridad por su jaula.

Patas y hocico: deberán están limpios y libres de incustraciones que denotarían estados carenciales o parasitosis.

Manto saludable: las zonas sin pelo pueden ser indicio de enfermedades o parasitosis.

Respiración y digestión: los hurones sanos respiran suavemente y sin ningún tipo de ruidos. Si la región anal está sucia es señal de diarrea.

¿Cuál es la mejor compañía?

Pareja: El macho suele llevarse muy bien con su compañera. Si no desea que tengan descendencia deberá castrarlos, lo cual es especialmente importante en el caso de la hembra.

Dos machos: Dos machos adultos y no castrados es difícil que lleguen a llevarse bien. Pero si han crecido juntos y se les ha castrado a tiempo también pueden llegar a ser muy buenos amigos y su convivencia no planteará ningún problema.

Dos hembras: La convivencia de dos hembras suele ser pacífica. Solamente puede haber algún enfrentamiento durante el celo si no están castadras.

Importante para los hurones

*Compañía: les gusta más jugar y mimarse en pareja, los animales solitarios acaban volviéndose ariscos.

*Actividad: un alojamiento amplio y correr sueltos a diario.

*Acción: muchas posibilidades de hacer ejercicio y siempre nuevos desafíos en el juego.

*Cosas buenas: una alimentación equilibrada después de jugar un poco hará que se mantengan siempre en forma.

*Una casa aseada: la higiene es muy importante, porque los hurones tienden a esconder restos de comida y éstos no tardan en pudrirse.

¿Qué es un hurón?

Un hurón es un verdadero animal doméstico. Pertenece a la familia de los mustélidos y desciende del hurón salvaje, que es un animal depredador que se alimenta a base de roedores, aves que anidan en el suelo, reptiles y anfibios. Entre sus parientes están la marta, el armiño, la nutria y la mofeta.